miércoles, 24 de febrero de 2010

No me equivoqué de carrera

Me equivoqué de especie.
Yo debí ser un cactus

jueves, 18 de febrero de 2010

Más lecturas, más idiotez

Si hay un comentario que me hacen con frecuencia (que no tenga que ver con mis lentes), o es "pinche amargada", o es "¡lees un buen!".

El de lees un buen me causa algo de gracia, porque 1)la lectura nunca me ha sido ajena: mi mamá lee un chingo, mi hermanota lee un chingo, mis tíos más cercanos leen un chingo, mi papá es la única persona que conozco que lee el periódico (él prefiere el Milenio) de cabo a rabo... así que leer me parece algo bien natural; y 2)tampoco es que me la viva leyendo el Ulises, ¿verdad Terry Pratchett?

El comentario me dice, sin embargo, que la gente espera algo (¿mucho?) de mí sólo porque como leo un buen sé que "a veces" no es una sola palabra.

Si la gente lo pensara un poco...

En ocasiones me invade una angustia horrible al pensar en tooodo lo que no tendré tiempo de leer. Entrar a una biblioteca o librería me hace sentir la idiota más grande del mundo, porque puedo ver parte de lo que nunca podré leer... lo que nunca voy a saber.

Mientras más leo, más sé que sé muuuy poco.

Ignorance is, indeed, bliss...

Pero nunca me siento tan idiota como cuando estoy en mi seminario de tesis y pienso en todas esas fotocopias que me rehusé a leer durante la carrera...

Así que ni modo, a seguir leyendo. Total, ya sé que estoy bien imbécil...

sábado, 13 de febrero de 2010

Ayer fue la cuarta noche seguida

durante la cual me desperté a tomar agua, vi un brillo verdoso y extraño por encima de mi cama, y creyendo que era una luz sobrenatural, pensé que era el fin y me iba a morir

...para después por fin reaccionar y darme cuenta de que era el estúpido dinosaurio ¡brilla en la oscuridad! que me regaló mi sobrino hace unas semanas, por quedarme a cuidarlo.

jueves, 11 de febrero de 2010

A veces extraño MySpace.
Sí, el facebook me mantiene informada de tooodo lo que hace la gente que conozco, y es más fácil enterarse de en qué andan.
Pero en el MySpace tenía que escribirle a las personas para saberlo.
En cierto estúpido modo sentía que al menos manteníamos el contacto.

sábado, 6 de febrero de 2010

Cosas que probablemente no sabes de mi blog

que no necesitas saber de todos modos. Y que no te importan tampoco.

- Abrí mi blog en una ocasión en que quería chillotear por algo taaan estúpido, que me dio pena decirle hasta a la gente del MySpace.
- Mi blog es "abierto" y acepta comentarios de absolutamente todos. Esto, porque muchos amigos míos no tienen cuenta de blogger, y así pueden comentar mi blog también. Lo que no significa que lo hagan; en realidad nunca lo hacen. Dejar los comentarios abiertos sólo me ha servido para recibir spam y ser insultada gratuitamente por gente que ni siquiera tiene las bolas como para no hacerlo anónimamente.
- Mi blog no genera controversia.
- Cuando releo entradas viejitas, mi blog me da risa porque creo que no he cambiado nada desde que lo abrí.
- Mi blog no es el mejor para enterarse de cosas del BRMC, es éste.
- Nunca le he cambiado la plantilla porque me da flojera, no porque ésta de bolas me guste mucho; en realidad tiende a marearme.
- Durante el primer año casi todas las entradas llevaron la palabra estúpido en el título.
- Ya casi no escribo porque lo que se me ocurre o sería un refrito de algo que ya puse, o tendería a echarle pedradas al 100% de las personas que conozco, y eso mejor se los digo en la jeta.
- El nombre está inspirado en una frase que una amiga usaba mucho; el url es casi igual a mi dirección de correo electrónico, para que no se me olvidara.
- En mi blog escribo "como hablo" y por su culpa, ya no sé redactar... fail
- He considerado el cerrarlo muchísimas veces pero no puedo, le tengo demasiado cariño
- A mi blog le gustan mucho las barbas, y como yo, si pudiera, se dejaría crecer una

lunes, 1 de febrero de 2010

Fails vacacionales

- Ser una mantenida y que tus padres sólo te den dinero cuando vas a la escuela.
- No salir de vacaciones por creer que hay trámites escolares que debes hacer... y que no los haya.
- Quedarte sin celular porque tu hermana (la que sí salió de vacaciones) se llevó el cargador, y tu aparato se rehúsa a cargar batería vía USB.
- Que toda tu familia te agarre de niñera, porque saben que no tienes nada mejor que hacer y por eso no puedes poner pretextos.
- Que tus amigos sepan que sigues vivo por tu twitter.
- No tener nada que hacer y que no haya nada en la tele.
- Que sean capítulos repetidos de tu programa favorito semana tras semana, todas las vacaciones.
- Que de todos modos los veas.
- No tener contacto social y traumarte con cualquier idiotez que ves en YouTube (por su propio bien, espero que a Andrew Lee Potts no se le ocurra visitar mi ciudad).
- No acercarte a tu mochila hasta el último día, y entonces darte cuenta de que tenías copias que leer / un ensayo que escribir / apuntes que pasar en limpio / autores que investigar / temas que repasar / todas las anteriores.
- Tener dos meses para hacerlo, y nunca terminar de limpiar tu cuarto.
- Cortarte el cabello el último día, y no al principio de las vacaciones, por si no queda como esperabas y si es necesario, poder esconderte dos meses hasta que crezca de nuevo.
- Ver películas malísimas en las madrugadas sólo porque sale Robert Downey Jr.
- Olvidar hacer el intento de reajustar el horario de sueño una semana antes de reanudar actividades.
- Comer cada que no tienes nada que hacer y sorprenderte cuando ya no te queda tu ropa.
- Enojarte con tus amigos por tener vida y no conectarse a las 3 am a desaburrirte.
- No avanzar nada de tu lista de lectura.
- No poder dormir.
- Vivir a base de salchichas y queso para nachos.

Mañana comienza mi seminario de tesis... estoicos, allá voy